Bosnia y Herzegovina (en lo sucesivo, “ByH”) es un país rico en recursos hídricos. Sin embargo, la gran mayoría de las infraestructuras de aguas existentes en el país fueron construidas hace más de 35 años y disponen de una tecnología muy rudimentaria, lo que ha aumentado el volumen de contaminantes en las aguas. Esto, unido al daño que sufrieron las instalaciones durante la guerra, hicieron que a finales de 1995 la comunidad internacional, encabezada por el Banco Mundial (BM), junto con las autoridades locales de ByH, iniciaran un programa de reconstrucción y desarrollo para el sector del agua en el país.

En cuanto a la cobertura de servicios, el 88% de la población tiene acceso al agua corriente, pero el acceso a los servicios públicos es menor, ya que un 58% tiene acceso al suministro público de agua y un 31% al de alcantarillado. Tan solo el 3% de la población está conectada a plantas de tratamiento de aguas residuales.

La financiación de proyectos en este sector es tanto privada como pública, y en ella intervienen bancos locales e internacionales, como el Banco Mundial (BM), el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) o el Banco Europeo de Inversiones (BEI), entre otros. Además, cierta cofinanciación también puede ser proporcionada a través de fondos nacionales, como fondos de protección ambiental, subvenciones del gobierno, o fondos para proyectos derivados del Instrumento de Pre-Adhesión (IPA). Por último, España participa activamente en la financiación de este tipo de proyectos a través de diferentes instrumentos, como el Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM).

El BM y la Asociación Internacional de Empresas de Servicios de Agua en la Cuenca del Río Danubio han estimado que durante los próximos 20 años ByH necesitará 3.660 millones de euros de inversión para desarrollar el sector del agua y las aguas residuales en aras a cumplir con el acervo comunitario medioambiental. De esta cantidad, un 38% debería ir destinado a proyectos de agua, y un 62% a la gestión de aguas residuales.

La presencia de empresas españolas en el sector del agua es limitada. Su competencia proviene de empresas de países como Alemania, Italia, Austria y Eslovenia, que llevan mucho tiempo en el mercado. Se recomienda a las empresas españolas que cuenten con la ayuda de un socio local, especialmente para llevar a cabo trabajos de construcción y de consultoría.

Fuente: ICEX