Un grupo de alumnos de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), ubicada en Chile, lanzó el proyecto Reciclawa, el cual busca reciclar y filtrar las aguas que provienen del lavabos, lavavajillas, lavadoras y duchas para, posteriormente, destinarlas al riego de cultivos a pequeña, mediana y gran escala. El proyecto Reciclawa, desarrollado por la empresa Kaptawa, hace uso de tecnologías basadas en la infraestructura verde y el funcionamiento de humedales construidos con el cual se busca incrementar la disponibilidad de agua en la comunidad.

La empresa Kaptawa está conformada por alumnos de la PUCV.

El grupo de estudiantes ha implementado un sistema de biofiltración fundamentado en humedales artificiales, estos se construyen en el mismo lugar donde se decide llevar a cabo el trabajo de filtración del agua y se adaptan al entorno para crear un espacio afable con el medioambiente, paralelamente, el sistema debe ser de utilidad para el riego de cultivos.

El humedal está conformado por material granular – puede ser arena, gravilla o piedras- donde las plantas macrófitas se identifican como las encargadas de filtrar el agua mediante una comunidad microbiana que elimina los contaminantes.

El alumnado implicado en esta iniciativa ofrece productos y servicios relacionados a la gestión de las aguas grises a nivel domiciliario, donde los productos son biofiltros o sistemas de tratamiento de aguas grises están basados en la naturaleza.

Los humedales cuentan con numerosos beneficios en almacenaje de agua y en su proceso de filtración natural.

Atendiendo a la información ofrecida por el equipo de Reciclawa, los humedales actualmente tienen una tasa de desaparición que triplica a la de los bosques.

Desde Reciclawa se busca replicar estos humedales -con los parámetros controlados – e implementarlos en Chile. La construcción de este tipo de humedales es recurrente en países como Japón, Alemania e Israel.

Se puso en marcha el proyecto en una casa particular perteneciente a la comuna de Quilpué, donde artificialmente crearon un humedal de seis metros cuadrados y de 60 centímetros de profundidad.  Las aguas grises procedentes de la lavadora y los lavabos van a parar al humedal artificial de forma directa, mientras que las que provienen del lavavajillas previamente deben pasar por un sistema de desengrasado antes de llegar al humedal.

Dicho humedal artificial subsuperficial de flujo horizontal es capaz de extraer 200 litros de agua diariamente funcionando al 68%. Es decir, en una semana puede llenar un estanque de mil litros de agua.

Desde el equipo de Reciclawa se asegura que el costo de la implementación de este sistema en una casa familiar chilena puede rondar el millón y el millón y medio de pesos (alrededor de 1.150 – 1.725 euros), esta inversión se podría recuperar en menos de un año debido a la cantidad de agua ahorrada.

Del mismo modo, este proyecto colabora con el embellecimiento del entorno y la creación de ecosistemas.

El proyecto dirigido por un ex alumno de Química Industrial de la PUCV, Vicente Contreras Vásquez, adjudicó financiamiento en la categoría Desarrolla del Concurso de la Dirección de Innovación y Emprendimiento DIE PUCV.

El objetivo de esta tecnología reside en el estudio de los procesos, el análisis de los afluentes y de la calidad del agua necesaria para nutrir los cultivos y su reutilización en el riego.

En la zona norte y centro de Chile la disponibilidad de agua no alcanza el umbral mínimo de desarrollo sostenible, por lo que el acceso a nuevas fuentes hídricas es de vital importancia en la región.

 

FUENTE: PUCV.