Un estudio de la Universidad Goethe de Frankfurt liderado por Daniel Enns y el Dr. Jonas Jourdan examinó 170 plantas de tratamiento de aguas residuales en Hesse para analizar su impacto entre la composición de especies de invertebrados acuáticos.

Se descubrió que los efluentes de estas plantas tienen un efecto dual: algunas especies desaparecen mientras que otras se benefician. Las larvas de mosca de la piedra y tricópteros son diezmados en algunos lugares, mientras que ciertos gusanos y crustáceos aumentan en número, especialmente en arroyos y ríos más pequeños. Estos cambios benefician a taxones tolerantes a la contaminación y perjudican a especies sensibles.

El estudio desafía la concepción previa de que los factores de estrés humano reducen la diversidad de especies, demostrando que puede haber cambios en la composición de las mimas, favoreciendo el desarrollo de unas, y reduciendo el de otras.

Para disminuír la contaminación del agua, se pueden emplear técnicas modernas de tratamiento como la ozonización y el filtrado con carbón activo en las plantas de tratamiento de aguas residuales. Estas técnicas aumentan la eficiencia del tratamiento y permiten la eliminación de una variedad más amplia de contaminantes, incluyendo sustancias traza, antes de que se liberen al medio ambiente.

Por último, cabe destacar que para conseguir que la reducción de contaminates sea efectiva, es crucial garantizar que las secciones aguas arriba estén en buenas condiciones químicas y estructurales, independientemente de las medidas tomadas.

 

Fuente: Universidad de Goethe, Frankfurt