La Comisión Europea insta a Irlanda a que refleje adecuadamente en su legislación nacional todos los elementos de la Directiva sobre normas de calidad ambiental (Directiva 2008/105/CE, modificada por la Directiva 2013/39/UE). El objetivo de la Directiva sobre las normas de calidad ambiental es garantizar que la contaminación química de las aguas superficiales no represente una amenaza para el medio acuático ni para la salud humana.

 

El Pacto Verde Europeo y el Plan de Acción “Contaminación Cero” fijan el objetivo de una contaminación cero para la Unión, con el fin de obtener beneficios en la salud pública, medio ambiente y alcanzar neutralidad climática. Aunque Irlanda ha incorporado adecuadamente la mayoría de las disposiciones de la Directiva en su legislación nacional, algunos aspectos aún no se han transpuesto completamente. Entre ellos figura la obligación de establecer normas específicas de calidad del agua para determinadas sustancias prioritarias y el deber de prestar esencial atención a determinadas sustancias prioritarias específicas al evaluar las tendencias de su acumulación potencial en los sedimentos o en la flora y fauna.

Irlanda tampoco ha transpuesto adecuadamente la obligación de incluir mapas de emisiones, vertidos y pérdidas de sustancias prioritarias, cuando corresponda, ni de incluir información sobre sus concentraciones en los sedimentos o en la flora y fauna. Por consiguiente, la Comisión ha decidido enviar un dictamen motivado a Irlanda. Irlanda dispone ahora de dos meses para responder y adoptar las medidas necesarias; de lo contrario, la Comisión podría recurrir al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.

 

 

Fuente: Comisión Europea